LICORES ZIRALL abre sus puertas para que conozca la historia de nuestros licores.
Tres generaciones de la familia GONZALEZ-OGEA son los artífices de que hoy en día nuestros productos alcanzaran un reconocido prestigio en la restauración española en general.
Fue en el año 1930 cuando D. JOSE LUIS GONZALEZ CONDE, y en su REBOTICA y almacén comenzaba a elaborar e indagar una serie de fórmulas para poder preparar el típico AGUARDIENTE DE HIERBAS que se hacía en Galicia. Esa mezcla, o pócima de hierbas, son con las que actualmente se prepara el LICOR ZIRALL, por lo que podemos decir que es ÚNICO E INIGUALABLE.
Literalmente las tres generaciones hemos nacido con las hierbas en nuestras manos. Esto nos distingue de los demás por su HISTORIA, TRADICIÓN Y CALIDAD. Por eso conocemos al detalle de nuestros productos.
Una vez fallecido el Sr. GONZALEZ, fue su hijo, D. JOSE LUIS GONZALEZ GONZÁLEZ, quién toma las riendas del negocio. Ni que decir tiene que el señor González tenía mucho camino por recorrer, pero el saber de su padre y la constancia en su trabajo, hicieron que el negocio y las hierbas fueran tomando prestigio entre el mundo de los POTEIROS GALLEGOS (AGUARDIENTEIROS).
Ya jubilada la segunda generación, toma las riendas el hijo de éste último, D. JOSE LUIS GONZALEZ PEREZ, que asume la gerencia. Un día, en una tertulia familiar(1990), deciden pasar al embotellado de los licores, partiendo siempre de la fórmula que había inventado su abuelo en 1930.
Unos principios duros, con muchos sacrificios. Pero todo ha quedado compensado cuando cualquier consumidor o visitante prueba nuestros licores y comprende la calidad de los mismos.
LICORES ZIRALL, restaura en pleno casco histórico de ALLARIZ (OURENSE) una parte del PAZO CASTRO-OGEA, cuna del señor GONZALEZ CONDE, donde su hijo y su nieto trabajaron durante muchos años esta magia de Allariz embotellada. Una bodega pequeña, artesanal, acogedora, sin cambios bruscos de temperatura, es ideal para un producto que pasa en maceración muchas horas de oscuridad y silencio.
Por eso, cualquier persona que visita Allariz, tiene en Rúa da Cruz ,11 un lugar de encuentro, de garantía ,de amabilidad, seriedad. Todos los que nos visitan demuestran que le quedan ganas de volver.